DIARIOELHIERRO.ES, redacción (23/9/2011)
Juana Machín León, de 82 años, no sale de su asombro. Esta apacible anciana del pueblo de La Restinga vivió hace unos días un episodio que no olvidará en su vida.
Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), se personaban en su vivienda y se llevaban dos tortugas, de las más de una docena que la noble mujer tenía colgadas en las paredes de su casa "desde hace más de 50 años", según confirman a DIARIO EL HIERRO familiares de la anciana.
Claro que estas tortugas, aunque protegidas, y según relató la propia Juana Machín, las cogió su marido (José Quintero, un pescador de la zona fallecido hace tres años) “hace muchos años”. La octogenaria mujer desconocía la especial protección de esta especie y sólo recordaba que era habitual en el pueblo esta práctica y que, incluso se llegaba a comer la carne de estos animales.
En los pueblos costeros de El Hierro, desde siempre, se recuerda ver en las paredes de las viviendas especies como cangrejos, estrellas de mar, tortugas y caracolas, que servían como adorno. Eran tiempos en que no existía prohibición alguna para hacerlo.
DIARIO EL HIERRO ha podido saber que Juana Machín se lamentó de la trascendencia de esta noticia, al sentir como si ella misma se tratara de una delincuente.
El pueblo de La Restinga que, finalmente, este hecho ''no vaya a más'' debido al especial estado de salud y a la avanzada edad de esta mujer, de 82 años, y muy conocida en el pueblo.
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