Diario El Hierro, Valverde (18/12/2015. 12:17 horas)
La Asociación de la Prensa de Santa Cruz de Tenerife (APT) se suma al dolor de la profesión periodística de las Islas por la muerte de Ricardo Acirón Royo, que ostentaba la condición de socio número 1 de esta organización profesional. Su fallecimiento se produjo en la noche de ayer, en la Clínica Universitaria de Navarra, a la edad de 72 años.
La junta directiva ha trasladado su más sentido pésame a la familia del periodista, a quien que esta misma semana le había concedido el Premio Patricio Estévanez por su trayectoria profesional.
“La trayectoria periodística de Ricardo Acirón refleja no solo un compromiso sino el esmero por hacer un trabajo riguroso, fruto de la dedicación y de la superación personal”, ha manifestado el presidente de la APT, Salvador García Llanos. “Le preocupaba el olfato noticioso pero también la escritura. Quería un estilo tan limpio como sustancioso, que el destinatario de cualquier texto interpretara a partir de la claridad con que estaba redactado”.
Periodista y profesor honorario de la Universidad de La Laguna, en la que había ejercido como catedrático de Periodismo hasta hace dos años, Acirón desarrolló una labor ingente en pro de la creación de la Facultad de Ciencias de la Información, de la que fue unos de sus principales mentores, igual que anteriormente del Centro Internacional para las Ciencias de la Comunicación (CICICOM), que tuvo a la APT entre sus entidades fundadoras.
“Ricardo trasladó la docencia vocacional al ejercicio periodístico y la restituyó posteriormente a las aulas universitarias. En ambas facetas su cometido fue sobresaliente”, asegura el presidente de la APT, para añadir que “en el haber de su itinerario profesional hay que consignar el tiempo que dedicó a la investigación de los medios y del quehacer periodístico canario. Sus libros en ese sentido son aportaciones muy valiosas”.
García Llanos alaba también “el trabajo que llevó a cabo en las páginas de El Día, que se vio generosamente complementado con el que desarrolló en distintos medios audiovisuales. Ahí se puede contrastar su sapiencia periodística”. Del mismo, valoró su estrecho vínculo con la Asociación de la Prensa, de la que fue directivo: “Se preocupó por ella; la quería activa y fortalecida e insistía también en las mejores relaciones posibles con el ámbito universitario”.
Nacido en Caminreal (Teruel), en 1943, Ricardo Acirón se estableció en Tenerife a finales de la década de 1960. Según recoge Eliseo Izquierdo en su obra Periodistas Canarios. Siglos XVIII al XX, este traslado obedeció a su deseo de buscar la lejanía, “como consecuencia de un choque dialéctico con el gobernador civil y jefe provincial del Movimiento turolense de turno”. Hasta entonces, tras haber cursado estudios de Periodismo en el Instituto de la Universidad de Navarra, que finalizó en 1966, había trabajado como redactor de La Gaceta del Norte (1966-1968) y luego, como director, en Lucha de Teruel (1968-1969).
Amplia trayectoria periodística y académica
Su labor periodística en Tenerife transcurrió en los periódicos La Tarde y El Día, a partir de 1970, donde fue, sucesivamente, redactor, jefe de sección, secretario de redacción, redactor jefe y subdirector, hasta que cesó en el puesto y dejó el rotativo tinerfeño, en 2002. También fue director de Jornada (1980-1982). En diciembre de 2003 fue nombrado presidente del consejo editorial de La Opinión de Tenerife.
Asimismo, ejerció durante años la docencia como profesor de EGB en colegios de Santa Cruz y La Laguna y fue profesor de Periodismo de la Universidad de La Laguna (1971-1975). Con posterioridad se doctoró en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense (1986), para acceder a la cátedra de Periodismo de la institución lagunera en 1991.
En 1999 recibió el título de Hijo Adoptivo de Santa Cruz de Tenerife y en 2002, el de Hijo Adoptivo de la Isla de Tenerife. Pertenecía como miembro de número a la Academia Canaria de la Lengua.
Entre sus muchas publicaciones figuran Canarias-CEE: Una vinculación desconocida (1985); La prensa en Canarias. Apuntes para su historia (1986); Prensa y Enseñanza en Canarias. Análisis de contenidos de los primeros periódicos impresos. 1785-1862 (1987); Tenerife: las aguas al rojo vivo (1987); Notas de prensa (1990); Entrevistas (1991); Canarias: Prensa y Turismo (1997); Canaria: prensa y política. Crónica periodística sobre el autogobierno y la transición democrática en las islas (1998); Canarias: Columnas periodísticas (2000) y Valores periodísticos de Andrés Bello en el amanecer del siglo XXI (2003). Fue también coautor de Los costes de la insularidad canaria y la Defensa nacional (1986) y autor del capítulo ‘Facultad de Ciencias de la Información’ de la Historia de la Universidad de La Laguna.
Publicidad